La combinación del dulce de leche y el queso crema, nos da como resultado un sabor exquisito. ¡Por eso te proponemos este cheesecake que nadie va a querer dejar de probar!
Sólo tenés que mezclar los ingredientes, tapizar el fondoy las paredes de un molde desmontable.
Llevás a la heladera hasta que endurezca bien y luego podés agregarle el relleno y la cobertura que más te guste.
Para el relleno
Mezclá los huevos, el dulce y el queso con batidor hasta que queden bien incorporados. Agregá al final la crema de leche batida a medio punto y por último los ingredientes secos.
Volcá la preparación sobre la base de galletitas y llevá a horno suave por 45 minutos más o hasta que quede firme el relleno.
Apagá el horno, abrí la puerta y, sin retirar el cheesecake, dejá que la torta se enfríe por completo adentro. Luego llevá a la heladera por tres horas como mínimo y desmoldá antes de servir.